Estilo repetitivo

Ayer en conversatorio con un grupo de damas –y un caballero- acerca de estilo,  de cómo todos tenemos uno y  que a veces se vuelve repetitivo;  alguien preguntó qué sucede si uno usa una blusa año tras año sobre año y nunca la desecha.  

  Aclaramos primero que el tener un estilo repetitivo en cualquiera de sus formas no es síntoma de necesitar entrar en un programa de “rehabilitación de la moda”,  ni está bien o mal, simplemente cada quién tiene un estilo y puede tener muchos orígenes.  Esto me trajo a la memoria una situación que viví siendo una jovencita. En una ocasión compré dos vestidos rosados, uno era bonito, caro y la tela arrugaba mucho; el otro era de lana, muy caliente y sin embargo los usaba porque a mi novio le encantaban.    Me casé con él y con el tiempo he notado que tengo debilidad por la ropa en color rosa,  es un color que no me sienta particularmente, de hecho me hace lucir cansada y con sombras en el rostro y tengo que trabajarlo bien para contrarrestar su efecto, pero por años no he podido evitar comprar prendas en ese color.   Algunas de nuestras decisiones de armario tienen que ver con la conexión emocional que desarrollamos con ellas.   Te gustaría una charla sobre cómo el estilo nos afecta a todos sin importar la talla, la forma, la edad o el presupuesto?

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